miércoles, 19 de octubre de 2011

Senderismo en La Cascada de las Ánimas. 13 de Septiembre de 2011.

Eran las 11.30 hrs. cuando partíamos junto a mi madre, mi hermana Verónica y yo, hacia La Cascada de las Ánimas, centro de Ecoturismo y Santuario de la Naturaleza ubicado en el hermoso valle del Cajón del Maipo, a 62 km. de Santiago. Ubicado específicamente en el pueblo de San Alfonso a orillas del río Maipo, con mas de 3600 hectáreas de valles, cordilleras, vertientes y cascadas, que le dan el nombre al lugar.
Fue creada con el fin de pasar experiencias inolvidables al aire libre, en la cual se pueden disfrutar de variadas actividades de deporte aventura, como la tirolesa, rafting, senderismo hacia las cascadas, camping, etc.
Nosotros teníamos ganas de pasar una tarde de aventura en familia, así que decidimos entrar a este lugar.


Una vez que entramos, pasamos a la oficina para decidir las actividades que haríamos, lo cual elegimos: Tirolesa y Senderismo hacia las cascadas. 
Entramos al recinto e inmediatamente podíamos ver hacia nuestra izquierda la zona de camping, el cual había mucha gente. Estacionamos el auto y nos preparamos para lanzarnos por la tirolesa.


La tirolesa consiste en una polea suspendida por cables montados en un declive o inclinación. Están diseñadas para ser impulsados por la gravedad y deslizarse por la parte superior hasta el fondo.
Este tipo de actividad es muy adrenalínica, ya que vas "sentado en el aire" y pasas por alturas muy grandes. En el caso del recinto, debíamos pasar por arriba del río Maipo. El primero en lanzarse fui yo. 



Al lanzarme, recordé las veces anteriores que había realizado esta actividad, y esta vez el cable era más largo. Intenté grabar mientras me lanzaba, pero fue un fraude ya que me movía mucho y no se distingue nada. Al llegar nos frenaban unos neumáticos, que era un sistema nuevo para mi, y debes agachar muy bien la cabeza, por que si no lo haces de seguro te pegarás con alguno. Luego se lanzó el resto de la familia y caminamos por un sedero hacia el otro cable.


El segundo lanzamiento, fue más corto que el primero, pero era mucho más adrenalínico, ya que el instructor a cargo de la actividad movía el cable de abajo hacia arriba. 
Una vez que terminamos decidimos pasear por los senderos de los alrededores y nos fuimos a almorzar.



Almorzamos en el restaurante del recinto, y yo miraba desde ahí la cascada, la cual era nuestro siguiente destino.


Una vez que terminamos de comer, preparamos nuestras cosas y comenzamos el Senderismo hacia las Cascadas de las Ánimas. Debíamos pasar por un puente colgante grande y así llegar al otro lado, donde tenían refugiados a algunos animales de nuestra zona. Cruzamos y comenzamos nuestra ruta.




Ya en el otro lado, vimos unas jaulas grandes de loros y otra de águilas. Eran unos animales preciosos. Estaban ahí refugiados, ya que su especie es muy vulnerable en esta época. Era muy impresionante ver el tamaño de estas aves, sus garras y sus grandes alas.



Mientras le tomaba fotos a las aves, me di cuenta que en el pasa mano en el que estaba apoyado, había una pequeña lagartija de colores muy peculiares.


Retomamos el sendero hacia nuestro destino.
Los primeros senderos era en curvas. Senderos muy amplios y fáciles de seguir. Nos encontramos con un puente pequeño. Lo pasamos y yo bajé para sacar agua del río y refrescarme un poco. El agua del río es totalmente limpia, así que no se preocupen en beber de ahí.




Seguimos el sendero, esta vez íbamos en ascenso pero habían muchos árboles, así que no se hizo tan complicado el camino. Solo nos quedaba 1 km. para llegar.




Encontramos otro lugar en el cual pudimos sacar agua fresca. Nos detuvimos por un momento y pasamos el último puente pequeño que había en los senderos.


Derrepente había una curva, y al pasarla estaba la primera cascada. Una pequeña cascada, la cual se podía tomar la mejor imagen. 
La Cascada de las Ánimas recibe este nombre debido a que, una leyenda antigua dice que hace muchísimos años atrás los arrieros bajando de la cordillera vieron a varias mujeres semitransparentes bañándose alegremente en las pozas y bailaban en el agua subiendo por las Cascadas. Las leyendas también dicen que en estos lugares vivían pequeños duendes que conversaban con los hijos de los antiguos leñadores y lees desordenaban los campamentos.
Una interesante historia para estas Cascadas.



No me quedé tranquilo mirando la cascada desde ahí, así que decidí acercarme para verla de más cerca y tomar mejores fotos.



Pensé, que ya que estábamos ahí, debíamos visitar la otra cascada, si no, no tenia gracia. Cuando les dije esto a los demás, me miraron con cara de "estás loco", pero al final igual accedieron. Así que comenzamos el ascenso hacia la otra Cascada, que al parecer era mucho más grande que la primera.


Los siguientes senderos, eran solo en subida. Con el calor se hacía un poco pesado el camino, pero el entusiasmo y las ganas de aventurar eran mayores. 
Cuando llegamos más arriba, se podía ver todo San José de Maipo, un lindo paisaje que había que mostrar.



Luego de unos minutos más de caminata, llegamos al fin a la Cascada, que efectivamente era mucho más grande. El lugar era precioso, el agua estaba muy fresca. Si te parabas cerca de la cascada sentías como la brisa llegaba en la cara. Era una sensación muy agradable. El sonido de la cascada era otra cosa que debo destacar, ya que es un ruido fuerte pero muy relajante. Grabé una imagen para que pudieran ver y escuchar, aunque no es lo mismo que estar ahí.





Bueno, nuestra ruta finalizaba aquí. Luego de un rato de pasear, mirar y fotografiar, volvimos al auto para regresar a casa.
Este lugar, es preciso para pasar una tarde en familia, amigos o una tarde romántica. Este Santuario tiene mucho para ofrecer, no solo con el deporte aventura, si no que con la distracción al aire libre y la naturaleza. Para informarse más sobre el lugar, pueden visitar la página web: www.cascada.net.
Les recomiendo visitar este precioso lugar, y disfrutar de las bellezas de la naturaleza.


Favio Augusto Carreño Trejo
Guía Instructor de Montañismo y Escalada
Estudiante de Pedagogía en Educación Física, Universidad de las Américas

1 comentario:

  1. todo bien, lindo paseo pero suelten las aves, son hermosas libres

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